Archivo de etiquetas| Relatos de Belzebú a su Nieto

GEORGES IVANOVICH GURDJIEFF – 6

G.I. GURDJIEFF – La Guerra y sus Consecuencias (VI)

De regreso a Francia, se instala, después del desastre de 1940, en un apartamento de la rue des Colonels-Renard. Entre los discípulos de todas las edades y condiciones a quienes recibe cotidianamente figuran dos escritores de los que se hablará: René Daumal y Luc Dietrich. Ambos mueren en 1944.

René Daumal

René Daumal

Luc Dietrich

Luc Dietrich

Tiene más de 70 años, pero su actividad no disminuye en absoluto. En 1949, se dirige, una vez más, a los Estados Unidos, para supervisar la edición de sus dos obras: Encuentros con hombres notables y Relatos de Belcebú a su nieto.

Encuentros con Hombres Notables

Encuentros con Hombres Notables

Durante el año 1949, después de un viaje por Francia y Suiza, reside algún tiempo en Vichy. Su salud se debilita bruscamente. De regreso a París, a comienzos del mes de octubre, ingresa en el hospital americano de Neuilly. Sabe que va a morir. Hace venir a sus compañeros y les habla extensamente a cada uno. El 19 de octubre, están todos reunidos alrededor de su lecho. Gurdjieff los mira, intensa, fijamente. Entonces exclama, con un humor matizado de ternura: “¡Os dejo metidos en un buen lío!” Se da la vuelta. Está muerto. Ha pasado sin agonía, con toda lucidez, de la vida al más allá.

G & Eternity

GEORGES IVANOVICH GURDJIEFF – 4

G. I. GURDJIEFF – El maestro del Priorato de Avon (IV)

Mme. Labori, esposa del célebre abogado de Dreyfus, pone en venta su propiedad de Fontainebleau-Avon: una inmensa mansión rodeada de vastos y suntuosos jardines. Gurdjieff queda inmediatamente seducido: es exactamente lo que le hace falta. Ayudado por sus discípulos londinenses y parisienses, compra la propiedad, que se convertirá en el centro de su enseñanza, y que tenía tanto de instituto como de monasterio.

Prieuré de Fontainebleu.

Prieuré de Fontainebleu.

Al principio, el grupo se componía de sesenta rusos, veinte ingleses y sólo dos franceses. En 1922, G.I.G. arregla el priorato reconstituyendo los planos de su Instituto de San Petersburgo. La vida de los alumnos se desarrolla al ritmo de los ejercicios físicos, respiratorios y coreográficos, etc., así como de las meditaciones. Objetivo: la plena expansión del hombre en su totalidad carnal y mental.

Prieuré. Dervish prayer.

Prieuré. Dervish prayer.

El 17 de octubre de 1922, la gran novelista neozelandesa, Katherine Mansfield, llega al Instituto. Está afectada de tuberculosis incurable y condenada a un desenlace a corto plazo. Ella lo sabe, y ha querido venir a morir cerca de aquel que considera como uno de los grandes iniciados de la época. Se han propalado al respecto, toda clase de chismes difamatorios: ¡Gurdjieff habría apresurado a sabiendas su fin, haciéndola dormir en el corral de las vacas, sin cuidados y sin alimentos!

Katherine Mansfield.

Katherine Mansfield.

En realidad la instala en una habitación cómoda y coqueta, especialmente dispuesta para esa circunstancia, y situada encima del establo del que emanan vibraciones benéficas (el fenómeno en cuestión ha sido comprobado muy a menudo). Cuando muere, el 9 de enero de 1923, en brazos de su marido, John Middleton Murry, Katherine Mansfield lo hace de una forma feliz y tranquila.

Tras una única representación de sus Movimientos, el 13 de diciembre de 1923, en el teatro de los Campos Elíseos, Gurdjieff lleva a sus grupos a una larga gira por los Estados Unidos. En Chicago, y sobre todo en Nueva York, en abril de 1924, en el Carnegie Hall, obtiene un gran éxito: Gurdjieff lo aprovecha para fundar en esa ciudad una sucursal del Instituto. Aquel a quien en lo sucesivo llamarán: “Monsieur Gurdjieff” accede a la celebridad. Se habla de sus grupos y de él mismo, en la Prensa, por todo el mundo.

Gurdjieff in USA.

Gurdjieff in USA.

En junio de 1924, está de regreso a París. Durante algún tiempo, se aísla en su apartamento, rue du Commandant-Marchand.

Al volver al priorato de Avon, el 5 de julio, su coche, que él conduce siempre a gran velocidad, se estrella contra un árbol. Trasladado al hospital de Fontainebleau en un estado casi desesperado, con varias fisuras craneanas, su extraordinaria y poderosa vitalidad le permite restablecerse con una facilidad y rapidez que dejan atónitos a los médicos, suscitando en torno de él un cierta emoción mezclada de temor y admiración. Gurdjieff aprovecha su convalecencia para escribir los Relatos de Belcebú a su nieto, que constituye su libro fundamental.

A partir de 1925, reemprende sus innumerables actividades: necesita ganar sumas cada vez más importantes, ya que el mantenimiento de su Instituto es más y más costoso. Paralelamente (y éste es un aspecto de su vida que muchos ignoran), asegura la subsistencia de toda una colonia de rusos blancos exiliados a quienes va a visitar de vez en cuando y que nada saben de su verdadera personalidad: para ellos no es más que un bienhechor muy rico y generoso…